martes, 9 de julio de 2013

Día 8: Último de día de playa


Comienza la cuenta atrás para que los chicos vuelvan a casa con vosotros. Ya se van escuchando algunas frases que nos hacen ver a todos que estos días se están acabando "Jo, en dos días ya dormiremos en casa". Pero todavía nos queda tiempo para seguir disfrutando y ninguno queremos desaprovecharlo, ellos están muy a gusto con nosotros y nosotros también con ellos, después de tantos intensos días se les coge mucho cariño. 

A las 8.30 todos arriba, a desayunar, recoger las habitaciones que aún nos quedan algunos cartelitos que alguien podrá heredar y después a hacer la bolsa para irnos a la playa y a la piscina por última vez. Esta vez hemos ido a la playa por la mañana y nos hemos dado un baño todos juntos y después...

 ¡Una gymkana y concursos de castillos de arena!


¡Lo hemos pasado genial y hemos disfrutado hasta el útimo segundo!

 La playa es la seña de identidad de este Campus y sin duda donde hemos vivido grandes momentos todos juntos. Es el lugar perfecto para que los pequeños disfruten y los ya un poco mayores volvamos a jugar como niños. En definitiva, el lugar perfecto para la diversión. Y así ha sido, después de 5 tardes en la playa, cuando ha llegado el momento de recoger para marcharnos, los chicos no querían irse. Ha llegado el momento de decirle adiós al mar y hasta el año que viene.

Y después de comer, a seguir con la diversión en la piscina, esta vez no hemos tenido sorpresa pero hemos disfrutado jugando todos juntos. Aunque otros también han aprovechado para echarse una siesta en la tumbona bajo la sombra. 

Ahora sí que ha llegado la noche de miedo, bueno más bien de sustos, llevan preguntando por ella desde el primer día, unos por miedo y otros porque les gustan estas cosas. 3 plantas de residencia, 60 habitaciones, 6 baños, pasillos y zonas comunes se han convertido esta noche en una "INVASIÓN ZOMBI". Los chicos debían guiarse por las pistas que se iban encontrando por el recorrido hasta lograr el conjuro que nos permitiese librarnos de ellos para siempre. Sorpresas y sustos detrás de algunas puertas, gritos y carreras por los pasillos, pero al final todos vieron que los zombis eran sus monitores favoritos, algunas fotos y todos a dormir.


¡BUENAS NOCHES!


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